El Camí La Mar de Almassora no contará con carril bici. Así lo confirmaron fuentes de la Diputación de Castellón, administración titular del vial, cuyo proyecto de remodelación se encuentra en el proceso de las expropiaciones. Si bien en un principio el proyecto de adecuación de este eje que une municipio y playa sí contaba con un espacio reservado para tal fin, desde el organismo provincial ratificaron su no inclusión tras la resolución de las alegaciones presentadas a este. Las razones ofrecidas son que esto supondría una ampliación del ancho de la vía en dos o 2,5 metros y, por consiguiente, un aumento de las expropiaciones y el incremento del coste de estas, explicaron las mismas fuentes. Asimismo, incidieron en que el dinero que tiene destinado la Diputación para este proyecto, en este caso 2,58 millones de euros, es para construir carreteras y que, si en un futuro se quiere incorporar este servicio al vial, será el Ayuntamiento de Almassora el que tendrá que asumir el gasto. Según las fuentes consultadas, algunos vecinos afectados habían manifestado su posición en contra de que les expropiaran más metros de terreno por este carril. Otras voces han señalado la inconveniencia del mismo por la “gran velocidad” con la que algunos conductores circulan. Lo que contempla la intervención es la eliminación de las curvas peligrosas, la colocación de biondas, así como la cubrición de las cunetas del vial y una rotonda en su llegada a la localidad. Edición en papel de El Mediterráneo

La Diputación de Castellón iniciará el proceso de expropiaciones para llevar a cabo la ejecución del proyecto de reforma del Camí la Mar de Almassora, que une el núcleo urbano con el litoral. Así lo han confirmado fuentes de la administración provincial a Mediterráneo, al dar por concluido el proceso de resolución de alegaciones después del periodo de exposición pública del proyecto de construcción, el estudio de impacto ambiental, el análisis de integración paisajística y el plan especial complementario del programa de esta obra pública. Las mismas fuentes han confirmado que se han tenido en cuenta muchas de las reclamaciones presentadas a la actuación, valorada en 2,58 millones de euros, y que ahora el procedimiento sigue en marcha con la fase de expropiación. Sin embargo, a pesar de confirmar el avance, descartaron hablar de plazos para el inicio de su ejecución al estar en marcha aún los trámites administrativos. La demandada intervención permitirá la eliminación de las curvas peligrosas del trazado, la colocación de biondas, así como el cubrimiento de las cunetas. Además, se contempla la construcción de una rotonda en su acceso al casco urbano con la que se prevé controlar el tráfico que aumenta en época estival con la llegada de más vecinos a la costa. La obra se ha convertido en una necesidad para los usuarios de esta vía que cada verano registra accidentes de tráfico, el último, la semana pasada y en el que falleció una vecina de la localidad. A la peligrosidad de la carretera se une la alta velocidad con la que circulan algunos conductores por una vía con tramos limitados a 40 kilómetros hora. PERSEVERANCIA // También se han mostrado tajantes en esta reivindicación desde el Ayuntamiento de Almassora, donde han incidido en que “seremos, somos y seguiremos siendo perseverantes en la reclamación a la Diputación de ejecutar la remodelación de la vía para mejorar las condiciones de circulación por la misma”. Por su parte, desde el PSOE han recordado que la mejora del Camí la Mar lleva casi 10 años de trámites: “En el año 2004 se inició el proceso y ahora han pasado dos años en los que se ha estancado en la exposición al público”, explicó el portavoz de la agrupación local, Santiago Agustí. El regidor añadió que su grupo seguirá reivindicando la urgencia de esta obra como lo viene haciendo “desde hace años, al igual que hemos sido críticos con la poca ambición del proyecto”. A partir de ahora, el vial registrará un aumento de tráfico con el inicio de las vacaciones y el incremento de población. Edición en papel de El Mediterráneo

Los 12 municipios castellonenses que han logrado un total de 27 banderas azules para la provincia reclaman a Costas “celeridad” para frenar la regresión del litoral, garantizar que no habrá más derribos de casas y que se puedan compatibilizar las actividades económicas en el litoral para impulsar el sector turístico sin dañar al medio ambiente, todo ello en el marco de la reforma de la ley de Costas de 1988, cuyo borrador se prevé publicar en julio. Alcaldes y representantes de Vinaròs, Benicarló, Peñíscola, Alcossebre, Torreblanca, Orpesa, Benicàssim, Castellón, Burriana, Moncofa, Xilxes y Almenara recibieron ayer los sellos de calidad turística en la playa del Recatí de Valencia de manos del president de la Generalitat, Alberto Fabra. Estas distinciones suponen un reconocimiento al esfuerzo que realizan los ayuntamientos durante años en aras de potenciar la oferta de sol y playa que atrae a miles de turistas cada verano, y cada vez más en otras épocas del año. El trabajo de los consistorios es doble aún más en tiempos de crisis, cuando el Ministerio de Medio Ambiente no invierte todo lo que demandan los munícipes. El diputado provincial de Medio Ambiente, Mario García, afirma que “hay que agradecer la inversión que realizan los municipios para que la provincia tenga un litoral de calidad, a pesar de la escasa ayuda que presta Costas y de que, a día de hoy, se está a la espera del borrador de una legislación que esté más acorde con la realidad”. A pesar de que el Ejecutivo se encuentra elaborando una nueva normativa en la materia, la mayoría de alcaldes sigue exigiendo una actuación “urgente”, como el de Vinaròs, Juan Bautista Juan, con el fin de frenar la regresión de la playa norte de Benicarló que también afecta a la vinarocense, donde “ya se están deshaciendo los espigones”. Por su parte, el primer edil de Xilxes, Vicente Martínez, asegura que lo más inmediato es “garantizar que no habrá más derribos de las casas de primer línea” y pide que se regulen “lo más rápido posible aspectos que hasta ahora se pueden considerar irregulares”. En esta misma línea, el de Moncofa, Jaime Picher, afirma sentirse “indignado” porque “Costas no ha actuado en la playa moncofense y sí en otros municipios”, y denuncia que las nuevas actuaciones deben ejecutarse “ya” y al margen de la ley porque si no hay presupuesto, “tampoco no lo habrá con o sin la legislación”. Por último, el diputado de Turismo y alcalde de Peñíscola, Andrés Martínez, resalta la buena imagen que dan las 27 banderas de la provincia y añade que presionarán “a Costas para que permita actividades económicas en el litoral como las que sí hay en otras comunidades”. Edición en papel de El Mediterráneo

El Ayuntamiento de Almassora culminará a principios de la próxima semana los trabajos de adecuación y puesta a punto del espacio marítimo de la localidad que dieron comienzo la semana pasada con el allanamiento de arenas y gravas. Las tareas, que se han desarrollado a lo largo de los tres kilómetros de costa que posee la población, “pretenden poner a punto nuestro litoral a las puertas de la llegada de la temporada estival y teniendo en cuenta que durante la segunda quincena de este mes son ya muchos los vecinos que se trasladan hasta la costa para ocupar sus segundas residencias”. El titular de la cartera de Urbanismo y Playas, Vicente Bernat, ha incidido en la importancia de estos trabajos a los que se han sumado las labores de colocación e instalación de pasarelas de madera y puesta a punto de lavapiés. “En este caso, ya está toda la instalación concluida”, ha apostillado el regidor. Por lo que respecta a los tareas de allanamiento, Bernat ha recordado que dieron comienzo a principios de la pasada semana y se ha mostrado confiado en que “concluyan durante los próximos días de modo que el litoral esté operativo y en condiciones óptimas para el uso de bañistas y visitantes”. Unas labores por las que el edil ha pedido disculpas, “puesto que somos conscientes que pueden generar molestias y contratiempos a los usuarios del litoral, pero que entendemos son necesarias para mejorar las condiciones de este espacio público”. Cabe indicar que desde el pasado mes de mayo el consistorio ha intensificado los trabajos en la costa para preparar al litoral de cara a la temporada estival. Unas labores que no solo se han desarrollado a través del departamento de Urbanismo y Playas, sino también se han canalizado a través de los departamentos de Policía Local, Salud Pública, Relaciones Vecinales, Cultura o Servicios Públicos, en atención a las diferentes prestaciones que facilita cada una de las carteras municipales. El Mediterráneo

La finalización de la avenida Mediterrània de la playa de Almassora avanza a paso lento diez años después de que este proyecto comenzara a andar en el 2003. Tal como han confirmado fuentes municipales, aún quedan pendientes de abrir cuatro tramos de este demandado vial, cuyas dos fases más adelantadas no prevén dar luz verde antes de 2013 al proceso administrativo en el que se encuentran actualmente. Así, este proyecto, que constituye un importante eje de comunicación del litoral, aún dispone de proyectos en el aire. Este es el caso de los dos tramos de la calle Tramuntana, uno que conecta la travesía con el Camí La Mar y el otro situado tras la zona verde donde se instaura el cine de verano. Desde el Ayuntamiento de Almassora han informado que en ambos casos de apertura “ya están elaborados los proyectos, se sometieron a información pública y por orden de ejecución son los primeros a tramitar”. En la actualidad, y tras la información pública desarrollada, el proyecto de la zona costera será modificado para plasmar las alegaciones recibidas. Un procedimiento administrativo que está previsto que se prolongue a lo largo de este año y pueda culminar durante el ejercicio 2013, según explican las mismas fuentes. Más lejana todavía queda la apertura de los otros dos tramos de esta reclamada avenida, situada en la segunda línea de la costa almazorense, y con la que se dará forma una vía de 10 metros de anchura, de los que la calzada ocupa un total de seis. VIABILIDAD // Así, la viabilidad de la fase situada junto a l’Om Blanc depende de la tramitación de un Plan de Reforma Interior (PRI) “de inminente terminación”, según fuentes municipales. A este se sumaría el tramo de Mediterrània IV, emplazado entre la calle Venecia y Tramuntana, que sigue en fase de estudio al igual que hace un año. Cabe recordar que el desarrollo de los cuatro trechos que bloquean la conclusión de este vial ha estado supeditado en el tiempo a la evolución de tres PAI, como son el Benafelí y Meridià, ambos de gestión privada; y el de Tramuntana, de gestión directa del consistorio de Almassora. Versión en papel de El Mediterráneo