El Ayuntamiento quiere garantías de que la regeneración evitará la invasión de agua marina y gravas en las viviendas y calzada
El Ayuntamiento de Almassora reclamará al Ministerio de Medio Ambiente, y Medio Rural y Marino que garantice que la regeneración ambiental y lucha contra la erosión del tramo prevista en el tramo central del litoral garantice que “evita la invasión del oleaje y las gravas y arenas de la playa sobre la carretera que conocemos como el muro y las viviendas situadas en primeras líneas de costa”. Vicente Casanova, alcalde de Almassora, ha incidido hoy en la relevancia de una contestación que da respuesta a la consulta sobre el alcance de la evaluación ambiental del citado proyecto y que cuyo informe técnico ha sido presentado a la comisión de Territorio celebrada hoy en el consistorio.
El alcalde ha considerado que “el principal objetivo de este proyecto debe quedar meridianamente claro, sin lugar a matices que lleven a otras interpretaciones, que la meta principal del proyecto es la de evitar que el oleaje y el material que arrastra éste sobrepase el actual muro longitudinal de protección que pagó Almassora de contribuciones especiales de sus vecinos”. En opinión del alcalde, se debe por tanto incidir en que el objetivo del programa previsto es el de “proteger el muro longitudinal actual y el futuro paseo marítimo, así como las viviendas de las primeras líneas de costa, para evitar su inundación por el oleaje y las gravas y arenas que vienen sobrepasando dicho muro de protección, sobre todo en caso de temporales, cada vez más frecuentes”.
Esta demanda municipal se apoya en el hecho de que solo en el último año fueron ocho los temporales que golpearon sobre la calzada y viviendas de primera línea, lo que obligó a cortar la circulación, generó graves daños en ámbitos públicos y privados, así como provocó que, nuevamente, particulares e instituciones actuáramos para reparar las incidencias registradas.
Por este motivo, ha incidido el alcalde, el documento también incide en la consideración de que exponer que “en caso de temporal se mantendrá un resguardo de playa de 30 metros”, “no es suficiente concreción ni detalle sobre las hipótesis de gravedad del temporal que se han considerado en el estudio”, ha considerado el primer edil. En este sentido, el informe advierte que “todos sabemos que hay temporales mayores o menores”. Por ello, “el promotor, al elegir la mejor alternativa, debería indicar para qué tipo o gravedad de temporales la ha estudiado o evaluado”, incide el documento.
Por último, el documento también advierte de la necesidad de que, “en la medida de lo posible, las obras deberían realizarse fuera del período estival, ya que con ello lograríamos distorsionar lo mínimo posible el disfrute de los vecinos de la playa durante el verano, por lo que se estima oportuno que las obras se deberían interrumpir durante los meses de julio y agosto”, ha desgranado el alcalde.
La Plana al Día
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